Reflexiones de los Mensajes de la Virgen Maria en Medjugorje

Los Amo, Pero Sin Ustedes No Los Puedo Ayudar.

Paty Gallego Season 3 Episode 66

En esta reflexión, nuestra Madre nos invita a dejarnos encontrar por su amor, a unirnos a su oración que toca el corazón del Padre, y a convertirnos en puentes de gracia en un mundo que se ha alejado de Dios.

Shure MV7:

Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos del fuego de tu amor. Envía tu espíritu y todo será creado y se renovará la faz de la tierra. Vamos a continuar reflexionando hoy en la última parte del mensaje del 25 de marzo, el donde nuestra madre nos dice. Oren conmigo hijitos, porque sin Dios no tienen futuro ni vida eterna. Los amo, pero sin ustedes no los puedo ayudar. Por eso díganle sí a Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado. Vamos a reflexionar en las palabras preciosas de nuestra madre donde ella nos pide. Nos dice oren conmigo hijitos porque sin Dios no tienen futuro ni vida eterna. Se nos llama a orar con ella. Nuestra madre. No dices simplemente reen u oren, sino oren conmigo. Es un llamado a la unión. Entrar en su propio ritmo de oración. Es como si nos dijera yo la madre, estoy orando por ustedes, pero si ustedes no se unen, á mi, no puedo actuar plenamente. Hay una fuerza que sólo se desata cuando el corazón humano se abre y ora conmigo. Orar con la virgen es entrar en su corazón inmaculado y desde ahí. Interceder con una fuerza que conmueve al cielo. Es como si nos dijera hijitos. Ustedes tienen las llaves que abren la puerta de la misericordia para el mundo, pero sin su sí, esa puerta no se abre. Este es un grito de nuestra madre. Un grito profético. No hay medias tintas. El mundo hoy se construye sobre la ilusión de un futuro sin Dios. Pero ella, como madre, dice con ternura y firmeza, sin Dios, todo se desmorona sin Dios, no hay dirección. Sin Dios, el alma se pierde. El futuro no es solo lo que vendrá mañana, sino la eternidad. Y la virgen nos recuerda que sin Dios, estamos desconectados del destino eterno de nuestra alma. Cuando nuestra madre nos dice los amo, pero sin ustedes no los puedo ayudar. Nuestra madre nos quiere decir mi amor no cambia. Pero necesito tu libertad, tu oración, tu sí. Para que pueda intervenir. Qué misterio tan hermoso y tan grande. El cielo está listo, pero necesita nuestra respuesta. Este es el gran respeto de Dios por nuestra libertad y también la responsabilidad que tenemos. Si no oramos, si no respondemos, limitamos incluso lo que el cielo quiere hacer. Entonces la fuerza es orar con ella. Orar con nuestra madre es entrar en batalla con la reina de la paz. Exclamar con ella ante el trono de Dios es unir nuestras súplicas a las de la llena de gracia, la que nunca fue rechazada. Es participar del misterio de la salvación de otros de las almas de aquellas porque nuestra madre nos pide en el mensaje del de marzo del de aquellos corazones que se han alejado del corazón de su hijo. Cuando oramos con nuestra madre, el cielo se conmueve. Y sin esa oración, ella misma nos dice que no puede ayudarnos como ella desearía. Entonces, de verdad escuchemos estas palabras todos los días cuando nuestra madre nos dice los amo, pero sin ustedes no los puedo ayudar. Y recordemos, mi amor no cambia, pero necesito tu libertad. Tu oración. Para que pueda intervenir.