Decídanse Por El Paraíso Y Crean Que Dios Se Ofrece A Ustedes En Toda Su Plenitud

Hoy, la Virgen nos llama a decidirnos por el paraíso. Nos recuerda que sin Dios no hay futuro ni vida eterna, pero que Él se ofrece a nosotros en toda su plenitud. A través de la oración podemos alcanzar el amor pleno, el que da sentido a esta vida… y nos abre la puerta de la eternidad. 💙

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Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos el fuego de tu amor. Envía tu espiritu y todo será creado y se renovará la faz de la tierra. Hoy vamos á continuar reflexionando en el mensaje de nuestra madre, el de junio del donde nos dice que sin Dios, no hay futuro ni vida eterna. Pero qué es la vida eterna que es ese futuro al que estamos llamados? Vamos á dejar que la virgen misma no los rebele. En el mensaje del de octubre de nuestra madre nos dice queridos hijos, hoy deseo invitarlos á que cada uno de ustedes se decida por el paraíso. El camino es difícil para aquellos que no se han decidido por Dios. Queridos hijos decídase y crean que Dios se ofrece á vd en toda su plenitud. Ustedes están invitados y es necesario que respondan al padre que los invita á través de mí. Oren porque en la oración, cada uno de ustedes puede alcanzar el amor pleno. María nos habla con urgencia y ternura. Nos invita á decidirnos por el paraíso. Por qué? Porque no llegaremos ahí por accidente. La vida eterna no es automática. Es una respuesta de amor al amor. Dios ya se ha ofrecido á nosotros en toda su plenitud. Y ahora espera nuestra respuesta. Pero cómo responderle? María lo dice orando. Porque en la oración, cada uno de nosotros puede alcanzar el amor pleno. Y ahí está el secreto. El amor pleno no es un concepto ni una emoción efímera. Es Dios mismo llenando el alma hasta el fondo. Esa experiencia de ser amado sin medidas, sin condiciones, sin miedo es conocer, á Dios, no con teorías. Sino de corazón, á corazón. Y sólo la oración profunda, sincera y humilde nos lleva ahí en la oración, se abren los cielos en la oración, el alma se encuentra con su origen y su destino en la oración se derrite el hielo del miedo y se enciende el fuego de la esperanza porque en la oración descubrimos lo que realmente somos hijos eternamente amados. Y si alguna vez dudaste de la existencia del cielo, de la posibilidad de una vida eterna, de que haya algo más que este mundo frágil. Escucha á la madre. Ella te está diciendo con amor. Dios se ofrece á ti en toda su plenitud. Decide por él, cree en él. Ora, porque sólo así alcanzarás el amor que no pasa el amor que te salvará. Señor, yo quiero decidirme por el paraíso. Quiero vivir para ti y caminar hacia la eternidad. Quiero que mi alma sea tuya ahora y para siempre. En medio de las dudas del mundo, dame fe para creer en la vida eterna, esperanza para caminar hacia ella y amor para responderte con todo mi ser, quiero orar y encontrarte. Quiero alcanzarte y un día en tu reino abrazarte para siempre a.