Reflexiones de los Mensajes de la Virgen Maria en Medjugorje

Regresen A La Eucaristía, Regresen A Mi Hijo.

Paty Gallego Season 3 Episode 166

En esta reflexión, María nos recuerda que Jesús nunca nos ha abandonado, porque está vivo en la Eucaristía. Cuando volvemos a Él, su Corazón materno exulta de alegría. Y si confiamos en Él, hará por nosotros incluso lo que ni siquiera sabríamos pedir. 🌹

Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos el fuego de tu amor. Envía tu espíritu y todo será creado y se renovará la faz de la tierra. Hoy vamos á reflexionar en un mensaje hermoso de nuestra madre del de julio del donde nuestra madre empieza por decirnos. Queridos hijos. Mi hijo día a día á través de los siglos retorna vivo en medio de ustedes. Regresa á ustedes, aunque en verdad nunca los ha abandonado. En estas palabras de nuestra madre, encontramos un tesoro inmenso. Jesús nunca se ha ido. El está vivo y presente en le eucaristía. Desde la última cena, se quedó para siempre con nosotros cumpliendo su promesa. Yo estaré con ustedes hasta el final del mundo. Nosotros á veces lo olvidamos, nos distraemos, lo dejamos de lado, pero él permanece fiel. Nos espera silencioso en cada sagrario humilde en cada misa real en cada hostia consagrada. Qué maravilla el mismo Jesús que sanó enfermos, que perdonó pecadores y que dió su vida en la cruz. Se nos entrega hoy como alimento y como fuerza en la eucaristía siempre nos recibe aunque lo hayamos traicionado ó abandonado la virgen añade con ternura cuando uno de ustedes, hijos míos regresa, mi hijo, mi corazón materno, exulta de alegría. Aquí descubrimos la alegría de María. Cuando volvemos á Jesús, su corazón de made se llena de coso porque el regresar á él, volvemos á la verdad al amor, á la vida que necesitamos. Ella sabe mejor que nosotros. Cuánto necesitamos á su hijo? Por eso nos llama. Regresen á la eu existía, regresen á mi hijo no lo dice como un deber frío, sino como una madre que sabe dónde está la fuente de nuestra paz. Y finalmente, nuestra madre nos da una promesa preciosa. Confíen en mi hijo porque él hará por ustedes lo que ni siquiera ustedes sabrían pedir. Qué grande es el amor de Dios. Jesús conoce lo más profundo de nuestro corazón, los miedos que escondemos los anhelos, que no sabemos expresar las heridas que callamos muchas veces pedimos poco y mal, pero él quiere darnos mucho más. Donde pedimos fuerzas para soportar. Él nos regaló un corazón nuevo donde pedimos ayuda pasajera. Él no sabe un camino verdadero donde apenas atinamos á decir señor, ayúdame el responde con sanación, con consuelo y con vida abundante. Su amor siempre da más de lo que ni siquiera alcanzamos. Á imaginar. Confiar en Jesús es dejar que él haga en nosotros lo que ni siquiera sabríamos pedir. Conclusión, este mensaje nos deja tres certezas que iluminan la vida primero. Jesús nunca nos ha abandonado. El está vivo en la eucaristía esperándonos. Cuando regresamos a él, el corazón de María insulta de alegría porque sabe que ahí está nuestra paz. Tercero, podemos confiar plenamente. Jesús hará por nosotros mucho más de lo que sabríamos pedir hoy. Podemos decir gracias, madre santísima por llamarnos de nuevo, á tu hijo, Jesús. Gracias. Porque en la eucaristía siempre me esperas. Aumenta mi confianza en ti. Haz en mí lo que yo ni siquiera. Sabría pedir.