Los Estoy Preparando Para Nuevos Tiempos, Para Que Sean Firmes En La Fe Y Perseverantes En La Oración.

En esta reflexión, la Virgen nos recuerda que desde el principio hemos sido escogidos por Dios, que en el camino hemos sido preparados con amor y que hoy somos confirmados y enviados. Nos pide mantenernos firmes en la fe, perseverar en la oración y dejar que el Espíritu Santo obre en nosotros y a través de nosotros para renovar la faz de la tierra.

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Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos el fuego de tu amor envía tu espíritu y todo será creado y se renovará la faz de la tierra. Hoy vamos a reflexionar en tres mensajes de nuestra madre que, aunque fueron dados en distintos años, forman un mismo hilo de amor y de misión. En nuestra madre nos dice, queridos hijos, deseo que entiendan que Dios los ha escogido. Á cada uno de ustedes á fin de usarlos en su plan de salvación para la humanidad. Ustedes no pueden comprender cuán grande es su papel en el plan de Dios. Por lo tanto, queridos hijos, oren para que en oración lleguen á comprender el plan de Dios. Estoy con ustedes, á fin de que puedan realizarlo completamente. Aquí la virgen nos recuerda algo enorme. No estamos en el mundo por casualidad. Dios nos escogió desde el principio y cada uno tiene un papel en su plan de salvación. Quizá no lo comprendamos del todo, pero ella nos enseña el camino. La oración. Sólo orando, podemos descubrir y abrazar ese plan hermoso de amor en el María, vuelve á hablarnos y nos dice los estoy preparando para nuevos tiempos, para que sean firmes en la fe y perseverantes en la oración para que el espíritu santo obre a través de ustedes y renueve la faz de la tierra. Ya desde entonces. Nuestra madre nos estaba preparando para este tiempo que hoy vivimos cada rosario, cada ayuno, cada sacrificio, cada lágrima y cada sí que le dimos eran parte de esa escuela silenciosa de amor. Algo en nuestro corazón nos movía a seguirla, a responder, a estar con ella. Era su presencia, su ternura, su abrazo de madre que nos sostenía y nos animaba, á continuar. Y hoy entendemos que nada de eso fué en vano. Todo era preparación los que hemos respondido. Vemos cómo nos ha ido formando paso a paso, pero también para quienes aun titubean. Este mensaje es esperanza. Todavía es tiempo de responder. Todavía es tiempo de unirse á la misión porque este plan no es invención humana, es el plan de salvación del padre. En el nuestra madre nos habla con ternura y dice, queridos hijos, hijitos míos, amados míos, ustedes son elegidos porque han respondido. Han puesto en práctica mis indicaciones y aman á Dios sobre todas las cosas. Oren con todo el corazón. Ayen hagan sacrificios, amen por amor, á Dios y sean mis manos extendidas en este mundo que no ha conocido al Dios del amor. Aquí sentimos un abrazo del cielo. Nos llama amados. Nos agradece porque hemos respondido y nos confirma que somos elegidos, pero también nos envía con una misión clara. Orar de verdad con todo el corazón, ayunar con amor, vivir los sacrificios con entrega y ser sus manos extendidas para llevar el amor de Dios a quienes todavía no lo conocen desde hasta hoy, María nos muestra un mismo camino. Fuimos escogidos. Fuimos preparados. Y hoy somos confirmados y enviados que nuestro sí siga siendo fiel y lleno de amor para que Dios pueda obrar en nosotros y a través de nosotros renovando la paz y la faz de la tierra.