Reflexiones de los Mensajes de la Virgen Maria en Medjugorje

Mis Queridos Hijos, Regocíjense En Dios El Creador, Porque Él Los Ha Creado De Manera Tan Maravillosa.

Paty Gallego Season 3 Episode 228

En esta reflexión la Virgen nos recuerda que fuimos creados de manera maravillosa por el amor del Padre. Nos invita a regocijarnos en Él, a orar desde una gozosa acción de gracias, y a bendecir la vida en cada detalle para que la alegría del cielo descienda sobre nosotros. La gratitud transforma el alma y abre la puerta a la bendición.

Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos el fuego de tu amor envi, tu espíritu y todo será creado y se renovará la faz de la tierra hoy continuames este camino espiritual en nuestra novena de acción de gracias, dejando que la virgen mari nos enseñe a agradecer y a descubrir la alegría profunda. Que brota del corazón cuando reconocemos el amor de Dios en nuestra vida hoy meditamos sus palabras del de agosto de donde nos dice queridos hijos, hoy los invito á todos á regocijarse continuamente por la vida que Dios les concede. Mis queridos hijos regocíjese en Dios el creador, porque él los ha creado de manera tan maravillosa. Oren para que sus vidas est estén llenas de una gozosa acción de gracias que brote desde su corazón como un río de alegría den incesantemente. Gracias, á Dios, por todo lo que poseen por cada pequeño don que Dios les ha concedido. De esa forma, la bendición gozosa de Dios descenderá siempre sobre sus vidas. Qué belleza tan profunda encierra este mensaje aquí. La virgen insiste en una palabra que repite dos veces con amor rego regocijarse no es simplemente alegrarse. No es una emoción superficial ni un momento. Pasajero. Regocijarse es una alegría espiritual que nace de saberse amado por Dios, una alegría que brota desde lo más profundo del alma es una alegría que no depende de lo que ocurre afuera, sino de la certeza interior de que Dios nos ama, nos sostiene y camina con nosotros. Regocijarse es dejar que la certeza del amor del padre llene y desborde el corazón. Es permitir que su ternura nos abrace que su providencia nos tranquilice, que su fidelidad nos sostenga regocijarse es reconocer que nuestra vida es un milagro que nuestra existencia tiene sentido, que cada latido es un don y cada día una oportunidad de amar. Por eso la virgen nos dice regocíjese por la vida que Dios les concede. Porque la vida no es una carga, es un regalo que se celebra y continúa regocíjese en Dios el creador, porque él los ha creado de manera tan maravillosa. Nos recuerda una verdad que el mundo olvida. Somos un milagro. Cada fibra de nuestro ser es obra del amor de Dios. No somos casualidad ni accidente ni abandono. Somos creados, amados y sostenidos por el padre eterno. Después nos suplica, oren para que sus vidas est estén llenas de una gozosa acción de gracias que brote desde su corazón como un río de alegría. La acción de gracias no es una lista. Es un estado del alma, una fuente interior que corre sin detenerse. Un río que fluye porque sabe de dónde nace del amor de Dios. Cuando el corazón agradece la tristeza, se rompe la amargura, se disuelve la oscuridad se ilumina, la soledad se transforma. La gratitud abre la puerta al gozo espiritual y hoy. Entre todo lo que podemos agradecer, podemos regocijarnos porque Dios nos ha dado un regalo inigualable. La presencia de María entre nosotros ella misma nos dice en la bondad y en el amor de Dios creador también. Yo estoy con ustedes como un don. Ella es parte de lo que poseemos un milagro vivo en nuestro tiempo. Una madre que nos guía, nos consuela y nos conduce al Dios del amor. Finalmente, la virgen nos dice ven incesantemente. Gracias. Y la bendición gozosa de Dios descenderá siempre sobre sus vidas. Es decir, quien agradece vive bendecido, no porque todo sea perfecto, sino porque reconoce el amor con mayúscula, presente en todo. El cielo entero se abre sobre el alma agradecida. La gracia fluye donde hay gratitud. La paz habita donde hay reconocimiento y la alegría crece donde el corazón se inclina y dice gracias, señor resumen final en esta reflexion la virgen nos recuerda que fuimos creados de manera maravillosa por el amor del padre. Nos invita a a regocijarnos en él, á orar desde una gozosa acción de gracias y á bendecir la vida en cada detalle para que la alegría del cielo descienda siempre sobre nosotros. La gratitud transforma el alma y abre la puerta á la bendición.