Reflexiones de los Mensajes de la Virgen Maria en Medjugorje
En estos Podcasts reflexionamos sobre las palabras preciosas de Nuestra Madre, la Reina de la Paz. Palabras hermosas que vienen del Cielo como un regalo para nosotros.
Reflexiones de los Mensajes de la Virgen Maria en Medjugorje
Oren Por Aquellos Que No Oran Ni Desean La Paz y La Alegría Que Sólo El Altísimo Puede Dar.
En este mensaje, la Virgen María nos pide con urgencia que oremos por aquellos que no oran ni desean la paz y la alegría que sólo Dios puede dar. Ella nos recuerda que muchos viven lejos del Padre, sin conocer la verdadera paz ni la alegría profunda que brota del Corazón de Jesús. Nuestra oración puede abrir caminos de luz, salvar almas y llevarlas a la Fuente donde está todo lo que el corazón humano anhela.
Ven espíritu santo, llena los corazones de tus fieles y encienden ellos el fuego de tu amor. Envía tu espíritu y todo será creado y se robará la faz de la tierra. Hoy vamos a reflexionar en el mensaje del de noviembre del donde nuestra madre empieza por decirnos. Queridos hijos. En este tiempo de gracia, los invito á seguirme oren por aquellos que no oran ni desean la paz y la alegría que sólo el altísimo puede dar que sus almas est estén unidas en la alegría de la espera y su corazón será colmado de paz. Estarán convencidos hijitos de que todo irá bien y que Dios lo bendecirá todo porque el bien que hacen volverá á vds y su corazón se llenará de alegría porque están con Dios y en Dios. Gracias. Por haber respondido á mi llamado. Vamos á detenernos en esta frase hermosa de la virgen donde dice oren por aquellos que no oran ni desean la paz y la alegría que sólo el altísimo puede dar. Esta frase es de verdad, un tesoro, es un grito del cielo y es un llamado urgente la virgen nos dice oren por aquellos que no oran porque hay almas que viven lejos de Dios, sin oración, sin luz, sin fuerza interior perdidas en el ruido, en la confusión en la autosuficiencia, sin saber que existe un lugar donde descansar. Un corazón donde ser abrazados una fuente donde beber y continua diciendo ni desean la paz y la alegría que sólo el altísimo puede dar. Aquí está el centro del mensaje. Hay corazones que ya no buscan la paz porque han perdido la esperanza. Hay almas que ya no desean la alegria verdadera porque nunca la han conocido. Se han acostumbrado á vivir sin cielo. Y sin cielo, no hay vida. Sólo supervivencia confunden placer, compás diversión con alegría, ruido con vida, éxito con plenitud, pero la paz verdadera sólo viene del altísimo y la alegría verdadera sólo nace de Dios porque Dios no da cosas. Dios se da á sí mismo. La paz no es ausencia de problemas. Es presencia viva de Jesús dentro del alma. La alegría no es risa ni emoción pasajera es tener el corazón sostenido, abrazado y lleno de la certeza de ser amado. Y esa paz y esa alegría no se pueden fabricar. No se pueden comprar, no se pueden sustituir. Sólo el altísimo puede darla porque él es la fuente, la fuente de la vida, la fuente de la esperanza, la fuente del amor, la fuente de la alegría, la fuente de la paz que no se rompe fuera de Dios, todo es sed en Dios. Todo es plenitud. Por eso nuestra madre nos suplica, oren por ellos porque si ellos no han ido, á la fuente. Tú puedes llevarlos con tu oración. Tu oración puede abrir un camino hacia Jesús. Tu oración puede salvar un alma. Tú oración puede cambiar una eternidad. Nuestra madre confía en nosotros. Confía en nuestra disponibilidad, confía en nuestro amor. Confía en nuestra fidelidad porque nos conoce. Porque sabe que la hemos escuchado porque sabe que la seguiremos y nos recuerda tantas veces en otros mensajes. Ustedes son importantes en este plan de salvación. Nada es pequeño si se hace con amor, nada es inútil si se entrega á Dios, por eso hoy, con todo el alma, decimos madre querida, hoy respondemos á tu llamado hoy nos comprometemos á orar cada día por aquellos que no oran por aquellos que viven lejos del padre, por aquellos que no conocen la paz ni alegría que sólo Dios puede dar llé llevaros, á la fuente llé los al corazón de Jesús, que ellos también conozcan la paz que permanece y la alegría que salva y transforma asnos. Instrumentos de amor intercesores, fieles, almas que reparan y salvan.